Los tipos de empaques para alimentos abarcan una amplia gama de formatos, cada uno diseñado según necesidades específicas del producto, como flexibilidad para bocadillos, rigidez para líquidos o propiedades barrera para productos perecederos. Los tipos más comunes incluyen bolsas, envases tipo pouch, bandejas, botellas y latas, fabricados con materiales como plástico, papel, metal o compuestos. Nuestra empresa se especializa en empaques basados en plástico, ofreciendo soluciones como envases stand-up para productos secos, bolsas al vacío para carnes y contenedores rígidos para lácteos. Consideramos factores como la sensibilidad del producto, vida útil y conveniencia para el consumidor al seleccionar los tipos, utilizando tecnologías como el envasado en atmósfera modificada (MAP) para prolongar la frescura. La personalización permite crear tipos híbridos, como pouches con boquillas para líquidos o cierres resistentes a niños para mayor seguridad. Nuestro centro de I+D explora tipos avanzados como empaques activos que interactúan con el producto para controlar la atmósfera, o empaques inteligentes con sensores para indicadores de frescura. Cumplimos con normas internacionales para cada tipo, garantizando seguridad y compatibilidad. Con experiencia global, ayudamos a los clientes a elegir el tipo adecuado según tendencias del mercado, como la transición hacia opciones ligeras y recerrables. Nuestro servicio integral incluye diseño y pruebas, asegurando un rendimiento óptimo. Esta experiencia nos permite ofrecer tipos versátiles de empaques que aumentan el valor del producto y su sostenibilidad.